Si lo tuyo son unas vacaciones con conciencia ecológica, West Sussex y la Isle of Wight son el destino perfecto

Para empezar la aventura, nada mejor que la Pagham Harbour Nature Reserve, una recogida bahía con unas puestas de sol de órdago y con una fauna singular, ya que aquí es donde primero se escuchan los cucos en primavera en el Reino Unido.

Esta resguardada bahía es un humedal de importancia internacional que ejerce de poderoso imán para diferentes tipos de animales, como los charranes que frecuentan la orilla cuando regresan de buscar comida con sus picos llenos de anguilas.

No muy lejos, Lancing Beach es todo un referente del kite surf, aunque si no eres un amante del mar abierto tienes también la opción de salir en kayak por las tranquilas aguas de Chichester Harbour, conectado con el mar a través de un canal de suave corriente. Otra opción es embarcarse en el Solar Heritage, un catamarán propulsado por energía solar que recorre la costa de Chichester Harbour y desde el cual descubrirás la belleza del barro, con los matorrales de la costa como permanente telón de fondo, bañados por la luz del sol. La embarcación avanza con sigilo por las aguas, para no asustar a las aves, y permite contemplar de cerca los miles de aves zancudas y otros animales acuáticos, como las 40 focas de puerto que merodean por la zona.

Si pones rumbo al suroeste a lo largo del Solent llegarás hasta la Isle of Wight, cuyas playas, matorrales y bosques son el escenario perfecto para salir a la caza de deliciosos manjares.

“La Isle of Wight es muy accesible: puedes ir a cualquier parte y encontrar tranquilidad, y hay parques, costa y bosques siempre cerca”, asegura Alex Richards, de Island Wild Food (www.islandwildfood.co.uk), que organiza rutas de recolección por la costa de la isla. “En nuestras rutas lo importante no es lo que encontramos, sino la naturaleza, las vistas y lo que descubrimos.”

Las reservas alimentarias de la isla son abundantes y en función de cada estación y cada lugar Alex se topa con una cosa u otra. 

En primavera llegan las ortigas, el ajo salvaje y la flor de saúco, mientras que en otoño dominan las avellanas, deliciosas cuando se rallan sobre una capa de mantequilla, la rosa mosqueta (para el té) y las semillas de Alexander (con un sabor similar a la pimienta negra). Los sabores sorprenden por su intensidad y traen ecos del lejano oriente a esta isla meridional de Inglaterra. Alex tanto puede encargarnos la misión de recoger hierbas y plantas aromáticas para preparar una infusión como de encontrar agrilla para aderezar un humus o alga dulse para freír y disfrutar de unas deliciosas y saludables chips.